Turismo en NYC.

Un fin de semana, de nuevo explorando la ciudad de New York. Y poco a poco cada día me va gustando más. Ya no me da tanto miedo coger el metro, ya comprendo el uptown y downtown y voy haciéndome a la vida Newyorkina.

El domingo me fui con compañeras de la orientación a ver New York. Éramos 3 alemanas (Sophie, Alicia and Sabrina), una de Inglaterra (Holly) y yo.

Me he dado cuenta, de lo muy afortunada que soy al estar en esta familia. Una de mis compañeras, Holly, ha tenido que hacer Remage, que significa que te cambias de familia. Sólo se puede hacer una vez en toda tu experiencia como Au Pair, y la verdad es que ha hecho bien en pedir el cambio de familia, yo tampoco querría estar en una familia que no te trata como miembro de ella y te trata como una empleada que tiene que darles el gusto de ser y hacer lo que ellos quieran. Así que doy gracias por estar con esta familia, que la verdad es que me están tratando muy bien.

Durante el domingo, empezamos en Times Square, ya que el tren de Short Hills a New York nos deja en Penn Station (Manhattan) y está muy cerca. Estuvimos viendo algunas tiendas típicas de Times Square y nos dirijimos hacia Central Park. Fuimos antes de entrar a Whole Foods, que es como un supermercado de comida preparada para llevarla al parque o a donde tú quieras. Estaba lleno de gente, con comida de todo tipo, desde sushi, hasta pizzas, o incluso bocadillos de jamón serrano! Y por supuesto, como buena española amante del jamón serrano, eso fue lo que me comí: una baguette (que no es pan, es...como bollo), de jamón serrano con tomate y lechuga. Estaba bastante bueno, y ya podía ya que me costó 7$. Y por allí también había todo tipo de dulces: brownies, galletas, muffins, croisants con chocolate, bizcochos... así que probé una super mega galleta con trocitos de chocolate, por el módico precio de 2$ jaja. Era enorme eso sí. La verdad es que el super me gustó mucho, había de todo, listo para tomar y con muy buena pinta. Volveré a por otro bocata de jamón, seguro!!!

De ahí, nos fuimos a Central Park, comimos en el césped mientras veíamos a lo lejos un partido de beisbol. Sí, en un parque hay canchas de beisbol. Me encantó, como en las películas, justo lo que me esperaba. De hecho, casi nos dan con la pelota y se rieron bastante de nosotras, pero salimos sanas y salvas. Vimos a una pareja recién casados haciéndose fotos en Central Park, y me sorprendió que hubiera carril para bicis, pero también para gente que hacía footing. Me pareció muy buena idea. No vimos mucho este parque, ya que dar la vuelta a Central Park cuesta 4 horas, pero vimos rincones con mucho encanto, y pasamos por donde ponen la pista de hielo en invierno, que sin duda, iré a patinar en cuanto la pongan.

Cuando salimos de Central Park, fuimos a una tienda de Apple que está bajo tierra, y abren las 24h del día. Era enorme, y en cuanto a precios, sí que era más barato. Pero luego como siempre hay que añadirle la tasa, así que más o menos yo creo que salía por el mismo precio. Estaba rep

leta de gente, así que no duramos mucho allí. También estuvimos en Nike, una tienda de 4 pisos, enorme, gigante, me alucinó. Pero lo mejor estaba por llegar...

Nos dirijimos hacia el World Trade Center, el 11/9 memorial de las Torres Gemelas. Estuvimos en la piscina de la torre que estaba situada en el norte, increíble lo que sucedió allí hace ya casi 15 años. En cada psicina, se pueden leer los nombres de las personas que fallecieron ese día, en el atentado. Me sorprendió mucho, es increíble la cantidad de personas que fallecieron, y los héroes que arriesgaron su vida por salvar a otras. Hay un árbol que sobrevivió a la catástrofe y que todavía sigue en pie. Y al lado de la piscina norte, está el World Trade Center 1, que es un edificio nuevo que han construido, el más alto y que sin duda, este sí que me sorprendió por su magnitud, a pesar de que el final se viera desde abajo. Me queda pendiente ir al memorial museum del 9/11, las colas eran inmesas y queríamos seguir viendo más la cuidad.

Así que nos bajamos hasta South Ferry, donde pudimos ver Long Island a lo lejos, y la estatua de la libertad. Desde allí, podríamos haber cogido el ferry e ir a ver la estatua, pero también nos quedará pendiente para otro día, gracias a dios tenemos muchos días para venir a ver NYC.

Y ya, se nos hizo bastante tarde y decidimos volvernos a casa. Antes de coger el tren, entramos en Macy's, que es como un Corte Inglés a lo grande. Nada interesante, comercio. Pero aquí debe ser como nuestro Corte Inglés de importante, que todo lo que puedes necesitar, ahí está.

Y con ganas ya de que llegue el fin de que viene, para explorar NYC en la noche, ver la fiesta y vivir en la ciudad que nunca duerme. Esperemos con ganas el finde que viene!!! :)

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